El Centro Cultural Comuneros se tomó Tulcán durante el Día de los Inocentes, evidenciando que fueron quienes hicieron está propuesta hace doce años, como asegura Guillermo Erazo, coordinador de este colectivo. “Se intentó luego etiquetar políticamente está movilización cultural, bajo el argumento de que la municipalidad es responsable del espacio público”, señala Marcelo Hernández, gestor cultural.

 

Este corso que se realizaba en las tardes de cada 28 de diciembre, bajo la coordinación de Los Comuneros, debieron trasladarlo los creativos a la mañana, para diferenciar y mostrar la verdadera escencia y propósito de esta fiesta popular. Edwin Rosero, recuerda que entregaban premios en efectivo, que eran donados por la empresa privada

Tradición


Con el tiempo está tradición se convirtió en otro tipo de festejo, que no tiene memoria histórica y busca fines promocionales electorales, dice Patricio Rivadeneira, quien cree que no se debe perder el verdadero mensaje. Lo cierto, es que la música, movimiento y jocosidad que pusieron más de 30 actores culturales, llenó de alegría a la ciudadanía que salió a las calles.