La Diablada de Píllaro es una celebración popular que ha crecido en la última década. Según cuenta la historia, en épocas coloniales los indígenas se disfrazaban de diablos en repudio a las prédicas sacerdotales y al maltrato físico, psicológico, económico y moral que recibían de los españoles

La tradicional Diablada Pillareña marca el inicio de serie de fiestas patronales del 2024 en Ecuador. Esta tradición, que  da la bienvenida al nuevo año, da vida y color al cantón Píllaro, en Tungurahua. Sus días de festejos que estarán llenos de algarabía, emoción, música, licor y comida son desde el lunes 1 hasta el sábado 6 de enero.

Las calles están copadas por un promedio de 10.000 personas por jornada, quienes disfrutan de tradiciones y expresiones orales, rituales y actos festivos, conocimientos y usos relacionados con la naturaleza y el universo, que se transmiten de generación en generación.

Los relatos dicen que, durante la época colonial, los indígenas se disfrazaban de diablos en rechazo a las prédicas sacerdotales y al maltrato físico, psicológico, económico y moral que recibían de los españoles. En  la actualidad, personas de toda edad y condición se disfrazan de diablos y se unen al festejo.